J.M.P. El tema del congreso, que se clausuró ayer, ha sido «Inmunología y salud». Habrán sido muchos los temas tratados dado que la inmunología tiene que ver con numerosas áreas de la salud.
Exacto. Una de las cosas más bonitas e interesantes de la inmunología es su carácter multidisciplinar, pues interacciona muy directamente con una amplia variedad de disciplinas científicas y de la salud. Está intimamente relacionada con la oncología, la reumatología, la pediatría, dermatología, nefrología,€ Por tanto, el congreso ha servido para proporcionar una visión global de las últimas investigaciones y desarrollos traslacionales en el campo de la inmunología, tanto en el terreno diagnóstico y terapéutico como incluso en el pronóstico.
¿Y cuáles han sido, en general, los temas más importantes tratados en el congreso?
Obviamente, todos los temas han estado relacionados con el ámbito de la salud. Se ha hablado de inmunoterapia, es decir, de todo lo relacionado con los fármacos biológicos utilizados para tratar enfermedades autoinflamatorias y autoinmunes –aquellas enfermedades en las que el sistema inmunitario agrede al propio organismo–, así como determinados tipos de cánceres. Se ha hablado del uso de nanomedicamentos como reguladores del sistema inmunitario; por supuesto, de trasplantes y de las técnicas de desarrollo de tolerancia utilizando terapia celular, es decir, de como disminuir los rechazos utilizando menos medicamentos inmunosupresores y paliando los efectos secundarios de los mismos. También de inmunodeficiencias y control de este problema desde el nacimiento, de inmunoterapia frente al VIH/SIDA, así como problemas inmunológicos que afectan a la reproducción, de innovación docente en inmunología€ En definitiva, han sido muchos e importantes los temas tratados.
Y también importantes han sido los ponentes presentes estos días, nacionales y extranjeros.
Así ha sido. Cabe destacar la presencia del investigador del Departamento de Fisiología, Genética y Microbiología de la UA, Francisco Martínez Mojica, descubridor del sistema CRISPR-Cas, uno de los descubrimientos más importantes a nivel científico de los últimos 50 años y por el que se le ha propuesto para el premio Nobel. En el congreso nos ha hablado precisamente de esto, del sistema inmunitario de las bacterias y del mecanismo que utilizan para defenderse de los virus. Algo que tiene una gran relevancia en muchos campos.
Destacar que han sido cuatro ponencias plenarias impartidas por especialistas de reconocido prestigio como Ronald Germain o Lorenzo Galluzi, además de contar en la clausura con María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO). En total, hemos traído a 15 ponentes internacionales, además de a auténticas eminencias a nivel nacional.
¿Y en el ámbito de la inmunología qué líneas de investigación hay abiertas en la Universidad de Alicante?
En estos momentos estamos trabajando fundamentalmente con clones de células madres mesenquimales para modular el sistema inmunitario con el objetivo de poder en un futuro usarlas en el tratamiento de enfermedades autoinmunes y cánceres. En el caso de enfermedades autoinmunes la idea sería inducir una tolerancia fisiológica para, entre otras cosas, disminuir los efectos secundarios derivados de la medicación inmunosupresora convencional. Explicado de una forma sencilla, nuestros estudios podrían redundar en tratamientos más eficaces en enfermedades autoinmunes y en trasplantes, evitando o disminuyendo los rechazos de tejidos y órganos.
Se desprende de lo que dice que la especialidad de inmunología tiene un gran relieve hoy en día.
La investigación en inmunología es ciencia básica y clínica. Las dos partes son igualmente importantes, si bien la investigación traslacional o aplicada es cada vez más necesaria y demandada por la sociedad. Busca, por ejemplo, posibles biomarcadores inmunológicos para predecir el tipo de respuesta de una persona concreta a un tratamiento concreto. El futuro de la medicina es la medicina personalizada. Aquello que nos decían antes de que «no hay enfermedad sino enfermos».
Los profesionales inmunólogos deberían estar presentes en todos los comités de tratamientos de los hospitales, porque son ellos los que tienen una visión clara de los mecanismos y el comportamiento del sistema inmunitario ante determinadas circunstancias. Esa visión es fundamental para poder tratar y manejar diferentes fármacos que actúan sobre un punto concreto de ese sistema inmunitario.
¿Y qué opina sobre la polémica surgida en los últimos tiempos en torno a las vacunas? Hay gente que se opone a vacunarse.
Las vacunas tienen más de 200 años y han salvados millones de vidas. Por tanto, lejos de dar pasos hacia atrás es algo que hay que seguir fomentando. Todos debemos vacunarnos. El que una persona concreta tenga algún tipo de problema ante una vacuna no es motivo para negar sus beneficios. Dichos problemas son muy raros porque las vacunas son de los medicamentos más contrastados antes de salir al mercado, pasan por todas las medidas de seguridad posibles. Por tanto, hay que apoyar las campañas de vacunación. El beneficio de una vacuna está muy por encima del posible riesgo que pueda conllevar.